GLUTEOPLASTIA

Tal vez una de las mayores preocupaciones de las personas en la actualidad es su apariencia física y lucir una figura esbelta. La edad, el embarazo, disminuciones significativas de peso, falta de ejercicio, y otras razones más, provocan que algunas zonas del cuerpo, como por ejemplo los glúteos pierdan la tonicidad muscular y el tamaño que tenían, motivo por el que muchas optan por recurrir a productos, tratamientos o procedimientos para solucionar este problema.

Hoy en día se practican dos cirugías estéticas para levantar la cola, siendo los procesos más efectivos y sobre todo seguros para este fin. Se trata de dos intervenciones ambulatorias, que se realizan con anestesia general en todos los casos, con una duración de 2 a 3 horas aproximadamente.

Uno de ellos es la Lipoinyección glútea, que consiste en inyectar grasa en los glúteos del mismo paciente, extraída previamente mediante una liposucción. Así, se logra mejorar la forma de esta zona, proporcionando el tamaño ideal. En este procedimiento se genera una absorción natural por tratarse de una sustancia propia del organismo pero gracias a la avanzada técnica usada actualmente solo es de un 30%, el resto de grasa se integra con el músculo, manteniéndola  firme por mucho tiempo.

La otra opción es la Gluteoplastia, conveniente para personas que quieren mayor volumen con resultados menos variables. En la intervención se realiza una pequeña incisión en la línea interglútea donde se ubican los implantes justo debajo del musculo mayor de cada nalga. Estos, son elegidos en la valoración inicial, dependiendo de la contextura física y las expectativas del paciente que desea practicarse esta cirugía para levantar la cola, referentes que el especialista tiene en cuenta para sugerir el tamaño más conveniente y adecuado que logre una apariencia natural.

Luego de realizado cualquiera de los dos

procedimientos,  el paciente deberá usar la faja especialmente diseñada, de manera permanente durante al menos un mes y después solamente para dormir, así ayudará a moldear el cuerpo, a desinflamar, a eliminar líquidos rápidamente  y a prevenir la aparición de fibrosis. Los puntos son retirados pasados 12 días del proceso para levantar la cola, dejando una cicatriz diminuta casi imperceptible. Es muy importante seguir todas las recomendaciones médicas al pie de la letra, tomando los analgésicos y antiinflamatorios prescritos, evitando ejercicios extenuantes durante el primer mes y asistiendo puntualmente a los controles con el especialista, para así garantizar una mejor recuperación.

Recuerde asesorarse por un médico especialista avalado por la Sociedad Colombiana de Cirugía Plástica, logrando resultados completamente armoniosos y naturales garantizando su bienestar y su seguridad.